Pareciera que el mundo es amable y cándido. Pareciera que todo sonríe y que detrás de los verdes céspedes y las bienpintadas cercas de madera, la vida es simple, fácil... Percepción pura. En las historias de David Lynch todo se tuerce. Inesperadamente, los personajes se ven involucrados en situaciones que no buscaron, encontrándose con perversiones o con una maldad incauta. Y sin embargo, siempre hay un halo de nostalgia, de tristeza por lo que no puede ser perfecto, o simplemente por lo que fue... Tenue sensación de suavizar con los labios un poco de terciopelo azul. Al final, todo regresa a como era en un principio, pero llevando a cuestas la sensación de que el mundo es frágil, delgado, corruptible... Las piezas de este soundrack alternan entre los momentos en que todo se transforma, pero también con breves destellos donde por unos pocos instantes, quizá todo está bien.
Blue Velvet OST