octubre 12, 2008

Blade Runner (1982)

Algunos soundtracks tienen vida propia... Si uno recuerda la innolvidable cinta Blade Runner, no sabe a bien cómo fue la música; lo visual es muy claro y grave, emotivo y efusivo; fuerte, pues. Pero cuando uno, a solas con el disco, decide concentrarse en lo sonoro, se sumerge en una atmósfera muy particular; aparecen mundos que, acompañados de la película, no se hubieran vislumbrado. El álbum establece varios momentos dramáticos, y claramente delimitados. La primera parte es una entidad propia, en demasía seductora, soft, cachonda; la que más me gusta y, a mi gusto, la mejor creada por Vangelis. La segunda apoya más claramente la diégesis y es más ambiental, cinemática y electrónica. El final –no voy a decir más–, como en la película. Un fascinante material que permitió, en una época aún temprana no sólo para el cine o para la composición sonora, elevar el pensamiento mismo. Que se transporten!




Publicado por Peco